¿Qué es la traducción técnica?
¿Qué es la traducción (redacción) técnica?
La expresión traducción técnica se usa en general para designar las traducciones sobre temas de ingeniería. En ocasiones también se emplea para las traducciones de temas científicos, como artículos de revistas o libros de texto de ciencias. En otros casos, incluso, se usa incluso como sinónimo de traducción especializada, por ejemplo se podría aplicar a una traducción de un testamento o un videojuego.
En esta página web, empleamos el término traducción técnica como sinónimo aproximado de traducción de textos de ingeniería con objeto informativo. En este sentido, por ejemplo, serían traducciones técnicas la traducción de un manual de automóvil, un informe de reparación de una catenaria, un pliego de especificaciones de un canal o un catálogo de transistores.
Tratemos ahora de definir la traducción técnica con más precisión mediante su objetivo: el objeto de una traducción técnica es transmitir información de manera totalmente objetiva para ayudar al lector a realizar una determinada tarea. A diferencia de la redacción científica, la redacción técnica no trata de impartir conocimientos, ni desarrollar ideas para apoyar una teoría.
Un aspecto que puede ayudar a determinar si una traducción es técnica o de otro tipo, es la noción de la autoría. Si un texto técnico está bien redactado, no contendrá ningún indicio del autor ni subjetividad alguna.
Una de las consecuencias del objeto de la traducción técnica, es que por lo general se presta poca atención a determinados aspectos clave en otro tipo de textos. En concreto, no se suele buscar que los textos técnicos sean entretenidos, estéticos ni inspiradores.
Dado que la única función de los textos técnicos es transmitir información, se podría pensar que el estilo tiene poca importancia. Nada más lejos de la verdad. Es crítico redactar y organizar ese tipo de textos de manera que tengan una cualidad específica: la eficiencia. Su único objetivo es facilitar la comprensión del contenido. Ello significa que el estilo debe ser claro, conciso e inequívoco.
En ocasiones se dice que la redacción (traducción) literaria es ajena las repeticiones, mientras que la (traducción) técnica las admite. La primera parte de la afirmación es cierta, sin duda en los textos literarios se evita repetir sustantivos y adjetivos, y se prefieren en su lugar los sinónimos y las perífrasis, en busca de una mayor fluidez y elegancia. La segunda parte de la afirmación no es correcta. No es exacto decir que la traducción técnica admita las repeticiones, lo cierto es que las exige. Lo propio y conveniente es repetir los términos las veces que sea necesario, de forma que no haya equívocos posibles, y lo mismo para frases completas.
Todo lo anterior es aplicable no solo para la traducción técnica, sino también para la redacción técnica. Las consideraciones siguientes son específicas de la traducción.
El traductor debe ser consciente de las diferencias entre los dos contextos (el del idioma original y del idioma destino) y hacer los ajustes necesarios para garantizar que la traducción hace referencia al ámbito de acción del lector potencial (acción que desea realizar). Como es natural, la realidad técnica normalmente es similar en todas partes, pero a veces hay diferencias entre los contextos correspondientes al texto fuente y el texto de destino (por ejemplo, tomas de corriente diferentes, normas, estándares y unidades de medida).
Ante una traducción técnica, el traductor debe preguntartse si el contexto está lo suficientemente claro para que el lector pueda acceder a al información necesaria para realizar la tarea. Es decir, el traductor puede y debe distanciarse del texto si el contexto lo requiere. En concreto, si el documento contiene una instrucción ilógica o inapropiada, o un error, o si está anticuado, el traductor es libre de intervenir y adaptar el texto.
Comprender el texto original es el principal requisito de la traducción técnica. Ahora bien, si el traductor no está familiarizado con dicho campo, ¿cómo podrá comprender el contenido?
Bibliografía. The Technical Translator: The Sherlock Holmes of Translation? Mathilde Fontanet
© 2014 Alejandro Moreno Ramos, www.ingenierotraductor.com